top of page
AnaMarie

Comprendiendo el Apetito: La Serie de Alimentación Consciente (Parte 1)

Bienvenidos a WholesomeTechLife. El blog de hoy trata sobre descubrir el arte de distinguir y honrar nuestras señales de hambre y saciedad.


El mundo actual es acelerado; pasas de una cosa a otra sin prestar atención. Constantemente bombardeado con estímulos y completamente ajeno a lo que sucede a tu alrededor. Miras el reloj y es hora de cenar. Calientas algo de comida en el microondas sin pensar y la comes lo más rápido posible para acabar rápido mientras estás de pie en tu escritorio haciendo tu trabajo. Comes bocadillos aquí y allá y nunca sabes realmente cuándo estás lleno. Aquí es donde entra en juego la práctica de la alimentación consciente. Un concepto que nos anima a frenar, prestar atención al momento presente y realmente comprometernos con nuestra comida. En el blog de hoy es de lo que vamos a hablar, la práctica de la alimentación consciente. La alimentación consciente se trata de cómo comemos. Se trata de ser consciente y estar presente durante nuestra experiencia de comer. Desde prestar atención a los colores y texturas de nuestra comida hasta las sensaciones y sabores que surgen con cada bocado. Esta práctica crea conciencia en torno a la comida. Permitiéndote desarrollar una relación más saludable con la comida, así como mejorar tu bienestar general y la salud intestinal.

 

Lo primero que trataremos sobre la alimentación consciente son las señales de hambre. En la sociedad actual, para muchas personas, la comida está disponible en cada esquina. A menudo comemos por hábito, aburrimiento o emociones en lugar de por verdadera hambre física. La alimentación consciente nos anima a hacer una pausa y conectar con nuestro cuerpo antes de alcanzar la comida. ¿Realmente tenemos hambre, o estamos comiendo por hábito o emoción? Esto nos permite sintonizar más con las señales de nuestro cuerpo, para poder distinguir mejor entre el hambre física y otros desencadenantes para comer. Estas señales pueden ser especialmente difíciles de identificar y distinguir si tienes trastornos gastrointestinales, trastornos alimentarios, eres neurodivergente o estás tomando ciertos medicamentos. A continuación, se presentan algunas señales comunes de hambre verdadera:

 

  • El rugido del estómago

  • Dolores de cabeza

  • Mareado/a

  • Baja energía

  • Dificultad para concentrarse en cualquier cosa excepto la comida

  • Sensación de vacío en el estómago

  • Temblorosos

  • Nebulosa mental

  • Irritabilidad

 

Estos signos tienden a ser señales de hambre reales; sin embargo, también pueden ser signos de otras cosas como desequilibrios en el azúcar en la sangre, desequilibrios hormonales, desequilibrios de vitaminas y minerales, problemas intestinales, problemas de tiroides, anemia, deshidratación, falta de sueño, así como otros problemas de salud.

 

Algunos signos comunes de saciedad:

 

  • Presión o molestia en el estómago

  • Sentirse lento

  • Perder interés en la comida

  • El estómago o la ropa se sienten ajustados.

 

Aquí hay algunos consejos para distinguir y honrar tus señales de hambre y saciedad:

 

  • Mantente hidratado: Mantenerse hidratado durante todo el día puede ayudar a regular el apetito y prevenir que los síntomas relacionados con la deshidratación imiten las señales de hambre.

 

  • Hacer una revisión contigo mismo: Antes de comer, tómate un momento para pausar y revisar tu cuerpo. Pregúntate si realmente tienes hambre o si estás comiendo por hábito, aburrimiento o emociones. Pregúntate qué tan hambriento estás en una escala del 1 al 10. Si estás entre 7 y 10, puede ser mejor esperar hasta que estés un poco menos lleno. Comer conscientemente implica ser consciente de tu estado físico y emocional antes de alcanzar la comida.

 

  • Escucha a tu cuerpo: Presta atención a las señales físicas de hambre como las mencionadas anteriormente. Si estás experimentando estos síntomas, puede indicar una necesidad de alimentación.

 

  • Come regularmente: Establecer horarios regulares para las comidas y comer alimentos equilibrados puede ayudar a regular las señales de hambre y prevenir fluctuaciones extremas en los niveles de azúcar en la sangre. Apunta a incluir una combinación de proteínas, grasas saludables, carbohidratos y fibra en cada comida para promover la saciedad y proporcionar energía sostenida. Para personas neurodivergentes, establecer alarmas o usar recordatorios visuales puede ayudarte a recordar comer regularmente.

 

  • Evita las distracciones y practica la alimentación consciente: Hablaremos más sobre esto en una publicación de blog diferente. Por ahora, concéntrate en eliminar las distracciones mientras comes, como ver televisión, deslizar el teléfono o trabajar en tu escritorio. Cuando comas, mastica lentamente y saborea cada bocado. Comer de manera consciente sin distracciones te permite concentrarte en tu comida y reconocer mejor las señales de hambre y saciedad de tu cuerpo. Para personas neurodivergentes, evitar las distracciones puede no ser lo mejor. En cambio, intenta reducir las distracciones que te abrumen o te pongan ansioso e intenta incluir solo distracciones que te hagan sentir bien y relajado.

 

  • Come hasta estar satisfecho: En lugar de comer hasta estar lleno; un 7 a 10 en la escala de hambre, intenta comer hasta estar satisfecho y ya no tener hambre; un 5 o 6 en la escala de hambre. Esto puede requerir sintonizar las sutiles señales de satisfacción, como una ligera disminución en el hambre o una sensación de contentamiento. Si lo necesitas, puedes buscar una escala de hambre en Google.

 

  • Practica la autocompasión: Sé amable contigo mismo si te resulta difícil reconocer o respetar tus señales de hambre. Distinguir y honrar tus señales de hambre es una práctica que requiere tiempo y paciencia para desarrollarse. Enfrenta cada experiencia de comida con curiosidad y compasión, sin juicio ni crítica.

 

La publicación de hoy sobre las señales de hambre y saciedad es la primera parte de una serie sobre la alimentación consciente. En un mundo constantemente abrumado por estímulos y distracciones, es fácil pasar por alto los mensajes sutiles que nuestros cuerpos nos envían sobre el hambre y la saciedad. Sin embargo, sintonizar nuestras señales de hambre y saciedad es esencial para mantener una relación saludable con la comida y el bienestar general. Al detenernos a escuchar nuestros cuerpos antes de alcanzar la comida, podemos distinguir mejor entre el verdadero hambre físico y la saciedad. Si bien identificar las señales de hambre y saciedad puede ser desafiante, especialmente para personas con ciertas condiciones de salud o rasgos neurodivergentes, practicar la autoconciencia y la compasión puede ayudar a navegar en este viaje. A través de estrategias como mantenerse hidratado, autoevaluaciones regulares y consumo consciente, podemos honrar las señales de nuestro cuerpo y cultivar un enfoque más intuitivo hacia la alimentación. Recuerda, reconocer y respetar las señales de hambre y saciedad es una habilidad que lleva tiempo y paciencia desarrollar, pero con práctica y autocompasión, podemos forjar una relación más saludable con la comida y con nosotros mismos.




Descargo de responsabilidad:


La información proporcionada en esta publicación de blog está destinada únicamente a fines educativos e informativos. El autor no es un profesional médico y no pretende diagnosticar, tratar o proporcionar consejos médicos para ninguna condición específica. Se alienta a los lectores a consultar con profesionales de la salud calificados para obtener consejos médicos personalizados, diagnósticos o tratamiento. Cualquier acción tomada basada en el contenido de esta publicación de blog se realiza bajo el riesgo del lector.

0 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page